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Aunque he hablado en varias ocasiones del sentido del humor, no se me ocurre mejor tema para abrir la nueva serie de artículos de este año que éste.

El sentido del humor y, sobre todo, reírse mucho es algo imprescindible en la vida. Está demostrado que la gente que se ríe a menudo vive hasta 10 años más que la gente normal. Reírse libera endorfinas (una droga natural del cerebro que es básica para el bienestar y mantener un buen nivel de felicidad) y nos mantiene en un estado de actitud positivo y muy Alfa.
Sólo alguien completamente confiado y relajado puede permitirse el lujo de bromear, reír y estar de buen humor en todo momento.

El sentido del humor debe utilizarse SIEMPRE…exceptuando los casos en los que podemos hacer daño, ofender o incluso molestar a otra persona. Ese es el único límite. En todo lo demás ¿por qué no estar siempre riendo, de buen humor y haciendo bromas? Es nuestra vida. Nosotros elegimos cómo vivirla. Y estar siempre riendo es una forma muchísimo mejor de vivirla que estar todo el día serio.

Hay que empezar por ser capaces de reírnos de nosotros mismos y con nosotros mismos. No estoy hablando de sacar a relucir nuestros defectos (aunque en algunos momentos puede ser un buen recurso)…sino en representar papeles exagerados y divertidos; hacer teatro; darle emoción a las bromas y ser espontáneos con cosas que dependan de nosotros.

Veamos algunos ejemplos:

– Poner caras absurdas/graciosas/ridículas….poner poses, hacer gestos ridículos o exagerados como haríamos con un niño pequeño para hacerle reír.
– Tomar el pelo haciendo creer algo muy malo sobre nosotros que no es cierto: que hemos estado en la cárcel; que somos fanáticos religiosos; que hemos estado en una comuna hippie viviendo durante años; etc. La idea es decirlo MUY serio, primero…y cuando se lo empiecen a creer, entonces dejar claro que era broma y reírnos con ella de su ingenuidad.
– Si nos sugiere que tenemos algún defecto, dar la razón y exagerarlo:

Ella: “Esa chaqueta es un poco de abuelo ¿no?”
Tú: “ Totalmente, de hecho acabo de salir del asilo ahora mismo, me la ha regalado Anselmo”.
O:
Ella: “Te veo demasiado perfeccionista”.
Tú: “Y eso que ahora se me han curado todos los “tics” nerviosos que tenía hace años. Antes era mucho peor”.

Hay que intentar estar siempre de buen humor, con buen ánimo y actitud de hacer bromas. La gente a tu alrededor lo agradecerá. Las chicas querrán estar a tu alrededor porque se lo pasarán increíblemente bien contigo. Tu vida cambiará si lo haces y serás mucho más feliz.