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El Factor Fulana hace referencia a todo lo que puede hacer una chica para evitar ser percibida como una chica fácil y/o poco selectiva. Si, por ejemplo, a una chica le gustamos pero se aparta cuando vamosa darle un beso, por miedo a parecer una chica “fresca” o “fácil”, eso sería debido al Factor Fulana. Es decir, siempre que la chica quiera hacer algo pero no lo haga por mantener su reputación en buen lugar, será debido al Factor Fulana.

La Santa Doctrina de la Seducción inventa mil y una maneras de evitar que esto ocurra. Pero ¿Por qué este empeño en acelerarlo todo? ¿Por qué todas las interacciones tienen que ser “express”? Parece que es obligatorio besar en la primera noche a toda costa y tener siempre sexo en la primera cita. Si no se consigue esto, es como si la interacción fuera un fracaso total.

No estoy de acuerdo con este punto de vista para nada. Una cosa importantísima es entender que cada interacción requiere una cantidad de tiempo distinta para madurar. Y, por lo general, las prisas no son buenas. Ni hay que acelerar, ni hay que ralentizar. Es una cuestión de equilibrio.

Cuanto más rápido se escale físicamente con una chica, menos sólida es probable que sea la interacción. Las chicas nos están mandado SEÑALES una y otra vez sobre esto. Así que, a partir de ahora, merece la pena plantearse que el Factor Fulana, lejos de ser algo a evitar, quizá debería ser algo que agradecer en beneficio del Juego Sólido.

Querer “escalar” muy rápido…querer tener sexo con mucha rapidez…es síntoma de necesidad. Y no sólo eso…es síntoma de ser POCO selectivo. Una persona realmente selectiva y con opciones no necesita irse a la cama con todas las chicas que encuentra. Va haciendo un filtro y se centra mucho más en la calidad que en la cantidad.

Es interesante pensar que las ganas de escalar rápido también es un síntoma de inseguridad. Alguien que realmente está seguro de sí mismo y que sabe que la interacción está yendo a su favor, no tiene prisa de que las cosas sucedan porque tienen confianza en que, antes o después, van a suceder. Una vez más, las prisas son un síntoma de miedo y necesidad. Miedo a que la interacción se estanque y necesidad de resultados.

Centrándonos en ellas…hay que entender que para una mujer su reputación es MUY importante. Para ella no es lo mismo besarse en público que en privado. Ni tampoco es lo mismo acostarse en la primera cita que en la tercera. Y esto tiene una razón. De hecho, yo aplaudo completamente el carácter discreto, racional, comedido y responsable de las chicas con respecto al sexo.

En la sociedad moderna está muy de moda decir que es bueno que las mujeres sean como “los hombres” en cuestiones sexuales…y que está genial que una chica pueda acostarse con los chicos que quiera que acabe de conocer. Pero…¿acostarse con gente que no conoces de nada es realmente una meta sana de una persona feliz? ¿No sería mucho más sano que, en vez de ser las mujeres las que se comportaran como los hombres, fuéramos los hombres los que nos comportáramos como las mujeres? ¿No sería mejor que nosotros también fuéramos responsables y selectivos a la hora de tener sexo con chicas?

La promiscuidad patológica…la constante actividad sexual con gente que no conocemos de nada no es algo que me parezca para nada una meta a seguir. Al contrario. Defenderé a capa y espada hasta el día en que me muera que la base de la felicidad es SER SELECTIVO en TODAS las áreas de nuestra vida. En nuestra vida sexual, también. No estoy hablando de estar obsesionado con tener novia. Se puede tener relaciones esporádicas, pero siendo selectivo.

Si en una interacción con una chica nos está entrando la prisa, esto quiere decir que la chica NO nos gusta lo suficiente y que nos estamos aburriendo con ella. Algo está fallando. Si nos da tiempo a pensar que la interacción va despacio, es que algo estamos enfocando mal, porque con si la chica nos encanta y nos divierte, no tendríamos que tener problema en invertir el tiempo necesario…y si la chica no nos divierte…entonces ¿qué demonios estamos haciendo con ella?